29 de noviembre, 2017
Sólo veinte años tiene Solange Jocelyn Quilape Colipi, estudiante de segundo año de la carrera de Nutrición y Dietética en la Universidad de La Frontera, nacida en Santiago, pero oriunda desde su primer año de vida de la localidad de Huitranlebu, ubicado en la comuna de Purén. Su enseñanza básica transcurrió en la Escuela rural C-64, de Huitranlebu, y la media en el Liceo Bicentenario Indómito de Purén, en donde vivió interna desde octavo básico hasta cuarto medio. Cuenta que desde pequeña ha practicado deporte y al llegar a la ciudad continuó con distintas disciplinas deportivas. En esa época surgió su interés por la buena alimentación y pensó abrazar la profesión de nutricionista. “Desde entonces me ha importado cómo llevar una buena alimentación cuando uno hace deporte, desde cuando viví interna mantuve la dieta del internado, sin salirme, aunque en mi casa me regaloneaban con cosas ricas cada vez que llegaba “, cuenta. PSU A esta altura, ya en segundo año en la UFRO, Solange se siente contenta y satisfecha por la universidad que la acogió y la carrera que eligió. “Cada vez me gusta más lo que elegí, estoy aprendiendo nuevas cosas y creo que cada día se van a ir abriendo más puertas para las nutricionistas. Así como está la población hoy día, tenemos que ayudar educándonos para eso”. Asegura que no está contra la comida chatarra, sino en los excesos. “Uno puede comer todo, no está prohibido, pero hay que saber comer y qué comer. Yo no tengo ese problema porque donde vivo me preparo mi comida”. CAMBIO Solange estudia con la Gratuidad, la Beca Indígena y la Beca Residencia Indígena, que le permite pagar el arriendo de la casa donde vive. “Fue difícil el cambio desde Purén a Temuco, pues Huitranlebu es un lugar tranquilo, los vecinos no están tan cerca y uno como que tiene todo el espacio, la libertad y no tiene que escuchar todo el tiempo a los vehículos”. Su sector aún mantiene el paisaje natural. Por allá, por esos rincones de este sur, Solange había escuchado alguna vez mencionar a la Universidad de La Frontera. “Se decía que era la mejor, que se puede estudiar y que ofrece bastante ayuda. Entonces cuando llegamos a cuarto medio todos querían optar por la UFRO, así que alrededor de diez compañeros llegamos a esta universidad. Unos eligieron Enfermería, otros Contabilidad…”. Forma parte del Programa RÜPÜ de la UFRO, iniciativa que otorga un valioso apoyo académico a los estudiantes con ascendencia indígena que ingresan a la Universidad de La Frontera. “Encuentro que es un programa muy bueno, porque ayuda bastante a los estudiantes con tutorías, haciendo talleres que nos acerca más a nuestra cultura”, subraya. “Yo todavía no me decido, pero me gustaría trabajar en alguna clínica, con niños. Si se me diera la oportunidad, me encantaría volver a trabajar en Huitranlebu donde está toda mi familia, porque mis padres son nacidos allí”, dice al comenzar a proyectar su futuro al egresar de la universidad. Solange tiene dos hermanas menores a quienes aconseja. “Mi mejor mensaje para ellas y para los jóvenes de Purén que están indecisos, sería que se esforzaran para seguir educándose y que no debe importar el aspecto económico, porque con la ayuda que ofrece ahora la UFRO se puede salir adelante”, finaliza. |
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Su enseñanza básica transcurrió en la Escuela rural C-64, de Huitranlebu, y la enseñanza media en el Liceo Bicentenario Indómito de Purén. | |
Forma parte del Programa RÜPÜ de la UFRO, iniciativa que otorga un valioso apoyo académico a los estudiantes con ascendencia indígena que ingresan a la Universidad de La Frontera. |
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Es beneficiaria de la Gratuidad, la Beca Indígena y la Beca Residencia Indígena, esta última le permite pagar el arriendo de la casa donde permanece en Temuco durante su época de estudios. |
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Actualmente cursa el segundo año de la carrera de Nutrición y Dietética en la Universidad de La Frontera. Al egresar, le gustaría regresar a Huitranlebu y aportar desde su profesión a la comunidad del sector.
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