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25 de agosto, 2017

 Barbara Jara 1

Desde que estaba en séptimo año básico, Bárbara Jara sentía interés por el área social. Aunque alguna vez pensó en estudiar Psicología o Pedagogía en Inglés, la carrera de Enfermería estaba en su horizonte y era su objetivo a alcanzar.

Fue en séptimo básico, donde tuvo sus primeros acercamientos a la universidad, cuando se incorporó al Programa Educacional para Niños, Niñas y Jóvenes con Talentos Académicos PROENTA de la Universidad de La Frontera, donde se mantuvo hasta su egreso de la enseñanza media.

Su rendimiento académico, sus buenos resultados PSU y su paso por PROENTA le permiten hoy a Bárbara estar cursando el quinto año de la carrera de Enfermería en la UFRO. Tener la tranquilidad de contar con la Gratuidad y otros beneficios, dice, han sido fundamentales para lograr su objetivo de llegar a la educación superior.

PREPARACIÓN

Siendo la mayor de tres hermanos, su enseñanza básica la cursó en el Colegio Mundo Mágico y su enseñanza media en el Liceo Pablo Neruda, ambos de Temuco. En tercero medio inició su preparación para la PSU a través de un preuniversitario.

“Entrar a la universidad fue un cambio gigante, porque es muy diferente a la enseñanza media. Hay un choque de contextos. En lo académico se requiere de un estudio organizado y diligente. El primer año fue difícil, pero salió todo bien y aprobé todos los ramos”, cuenta.

En sus primeros años en la UFRO, Bárbara contaba con la Beca Bicentenario y la Beca PROENTA, lo que le permitía cubrir el cien por ciento del valor del arancel de su carrera. Fue en el tercer año de la universidad cuando accedió al beneficio de la Gratuidad, lo que otorgó tranquilidad a su grupo familiar, ya que su hermana también había accedido a la educación superior y había gastos que afrontar. Actualmente ambas jóvenes tienen la Gratuidad, lo que les permite cubrir además el valor de las matrículas.

“Si no fuera por las becas completas que he tenido y la Gratuidad, creo que no habría estado en la universidad. Eso hubiese sido por decisión mía, porque sé que mis papás hubiese hecho todo el esfuerzo, pero yo no hubiese querido que pagarán tanto recursos que no tenemos”, sostiene.

PRÁCTICA

De marzo a junio de este año, Bárbara estuvo en la localidad de Puerto Cisnes, Región de Aysén, gracias a un convenio entre la Universidad de La Frontera y la Municipalidad de Cisnes. Como parte de la práctica extramuros de su carrera y siendo parte del Programa Internado Rural Interdisciplinario (PIRI) de la UFRO, trabajó con diversas agrupaciones comunitarias y realizó múltiples atenciones a pacientes de la zona.

“Es una bonita experiencia que ofrece una oportunidad de crecimiento personal. En la distancia uno valora más el cariño y apoyo de la familia. El trato con los pacientes allá es muy cercano. Se crea un vínculo más afectivo con las personas. Allá todos se conocen”, explica.

En las próximas semanas Bárbara iniciará su práctica intramuros en el Servicio de Neonatología del Hospital Regional Hernán Henríquez, donde podrá seguir desarrollando sus capacidades como futura profesional.

Al realizar un balance de sus cinco años de vida universitaria, reconoce que la educación superior le ha traído alegrías, aunque a veces también tristezas, pero sin duda le ha permitido crecer y construir su futuro tanto personal como profesional.

“La universidad te exige y uno también se exige, pero me ha permitido crecer, madurar y adquirir conocimientos y habilidades que quizás nunca se me pasó por la cabeza que podía tener. Ayuda a construirte como adulto”, sentencia.

 

 

 

 

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Su rendimiento académico, sus buenos resultados PSU y su paso por PROENTA le permiten hoy a Bárbara estar cursando el quinto año de la carrera de Enfermería.

De marzo a junio de este año, estuvo en la localidad de Puerto Cisnes, Región de Aysén, como parte de la práctica extramuros de su carrera y siendo parte del Programa Internado Rural Interdisciplinario (PIRI) de la UFRO.

En sus primeros años en la UFRO, Bárbara contaba con la Beca Bicentenario y la Beca PROENTA, lo que le permitía cubrir el cien por ciento del valor del arancel de su carrera. Hoy cuenta con Gratuidad.

En las próximas semanas Bárbara iniciará su práctica intramuros en el Servicio de Neonatología del Hospital Regional Hernán Henríquez, donde podrá seguir desarrollando sus capacidades como futura profesional.

Excelencia en La Frontera es un proyecto editorial de la Dirección de Comunicaciones de la Universidad de La Frontera, que busca visibilizar y resaltar las historias de mérito y esfuerzo de estudiantes de pregrado que han elegido esta casa de estudios superiores para cumplir su sueño de convertirse en profesionales, la mayoría de las veces, el primero en su familia.

Esta iniciativa comunicacional honra el compromiso que como universidad estatal y pública tenemos con la calidad y el derecho a la educación, de allí que nos proponemos resaltar las historias de jóvenes de distintos puntos de La Araucanía, que hoy cursan carreras en nuestra Universidad desde la tranquilidad de contar con el respaldo de la política pública de Gratuidad y apoyo al financiamiento.

En la misma línea, hemos elegido contar estas historias desde diarios comunales. Lo hacemos porque como Universidad regional nos interesa apoyar la comunicación local y favorecer su desarrollo.

Los invitamos a seguir este proyecto y a emocionarse con las historias de jóvenes talentosos y esforzados, que se forman con Excelencia en La Frontera.